Visa de no inmigrante para un cónyuge (K-3)

El cónyuge de un ciudadano estadounidense que está esperando una tarjeta verde puede solicitar una visa K-3 para ingresar a los Estados Unidos para reunirse como pareja. Esta es solo una visa temporal, pero solo la necesita durante un período corto porque los cónyuges de ciudadanos estadounidenses son elegibles para visas de familiares inmediatos que no están sujetas a cuotas anuales.

Si bien parece que la visa K-3 podría ser ventajosa para muchas parejas, existen algunos factores clave a tener en cuenta antes de solicitar una visa de no inmigrante K-3. Los defensores legales experimentados del Bufete de Abogados American Dream®™ estarán encantados de revisar su situación y ayudarle a determinar si una visa K-3 es la opción correcta en su caso o si otras opciones le ahorrarían tiempo y dinero.

Cómo funciona la visa K-3

El cónyuge de un ciudadano estadounidense solicita una visa K-3 haciendo que su cónyuge ciudadano presente la solicitud ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS). El cónyuge ciudadano primero presenta el Formulario 1-130, Solicitud de familiar extranjero, y luego el Formulario I-129-F, Solicitud de prometido extranjero. (Este formulario también inicia el proceso de la solicitud para hijastros elegibles). Después de que el USCIS apruebe las solicitudes, la información se envía al Centro Nacional de Visas administrado por el Departamento de Estado.

El Centro de Visas procesa la solicitud I-129F y luego la envía a la Embajada o Consulado de los Estados Unidos en el país donde se casó la pareja. Si se casaron en los EE. UU., la solicitud será procesada por la embajada o el consulado que expide las visas en el país de la nacionalidad del cónyuge extranjero. Si el país donde se casaron no tiene una embajada o consulado de los EE. UU., la solicitud se procesará en el lugar donde se procesan habitualmente las visas para ciudadanos de ese país. Por ejemplo, si una pareja se casa en Irán, la solicitud se procesará en Turquía.

Después de que el cónyuge se someta a una entrevista, un examen médico y otros pasos requeridos, puede recibir una visa K-3 para ingresar a los EE. UU. Una vez en el país, el cónyuge puede solicitar el Cambio del estatus para obtener una visa permanente con una tarjeta verde.

El problema con las visas K-3

En teoría, la visa K-3 ayuda a reunir a los cónyuges mientras esperan una visa permanente. Sin embargo, desafortunadamente, generalmente le toma al USCIS tanto tiempo procesar la solicitud I-129F para una visa temporal como lo hace para procesar la solicitud I-130 para la visa permanente. Y la solicitud I-130 debe presentarse primero. Si esa solicitud se aprueba antes que la I-129F, el USCIS cierra el expediente del caso de la visa temporal de no inmigrante, y el trabajo y los gastos que implican esa visa pueden desperdiciarse, aunque la información en la solicitud puede aplicarse a una visa permanente.

Hable con un abogado experto en inmigración sobre la visa K-3 o estrategias alternativas

Para algunas parejas, el proceso de la visa K-3 resulta ser una pérdida de tiempo y recursos, pero en otros casos, sirve como una herramienta valiosa para mantener unidas a las familias o para sentar las bases para una visa permanente. Un abogado con experiencia en inmigración del Bufete de Abogados American Dream®™ podría revisar su situación y determinar si la visa K-3 vale la pena en su caso, y ayudarle durante el proceso de presentación y solicitud. Para una consulta confidencial para averiguar cómo un experimentado abogado en inmigración podría ayudarle a seguir el camino más directo para alcanzar sus objetivos, comuníquese hoy con nuestra oficina.